Como nueva modalidad de ejercer justicia o dirimir en un proceso con flexibilidad las diferencias entre vecinos, comerciante-consumidor, entre familiares, etcétera. las reformas estructurales que llegaron a nuestro país en 2008; propician la creación de la Ley de Justicia Alternativa en el Estado de Jalisco; abriendo la posibilidad del acceso a una justicia pronta y expedita; como un derecho natural de la humanidad, por lo tanto; al Estado le corresponde que haya una amplia posibilidad de acceso a un órgano imparcial, para que sea la solución de controversias; para dirimir los conflictos que las personas puedan tener; derecho al que todos los mexicanos aspiramos.
Los Métodos Alternos para la Solución de Controversias (MASC) es un proceso no convencional en el cual el prestador del servicio debe guiar a los participantes para facilitar la comunicación entre ellos.
Acciones ante una controversia
Ante una controversia, utilizando algunas técnicas profesionales, que van desde la escucha activa; el parafraseo para hacer aclaraciones y precisiones, hasta llegar a los acuerdos que los participantes eligen y se comprometen a cumplir bajo un convenio que debe ser sancionado por el Instituto de Justicia Alternativa (IJA), es decir, lo revisan y le dan la validez por: contar con los requisitos legales; no contradecir ninguna ley y respetar los derechos y obligaciones de cada quien; observando muy de cerca el derecho superior del infante, de los adultos mayores y de personas con capacidades diferentes que se encuentren involucrados.
Para este fin, el Poder Judicial del Estado crea el IJA, y se le faculta para realizar también procesos de certificación a profesionales de diversas ramas para que puedan ejercer con esta nueva modalidad en Centros Públicos (dependen de la administración pública municipal), Centros Regionales (dependen del propio IJA), y Centros Privados de Métodos Alternos; que también, el mismo Instituto se encarga de acreditar, todo ello siempre y cuando se cubran los requisitos enmarcados en dicha ley; incluido el cursar un diplomado de 180 horas con valor curricular registrado ante la Dirección de Profesiones del Estado y avalado por el IJA; así como acreditar los exámenes de conocimiento teórico-práctico y el de habilidades éticas y profesionales.